Aguachica, Cesar. Noviembre 30 2008.El caer de la noche se vuelve la cómplice de muchos jóvenes, que ven en ella, una partícipe, una cómplice de sus actividades, del querer salir del día a día, una excusa para muchos jóvenes de querer olvidarse por un momento de sus problemas, de sus frustraciones y hasta de si mismos, que con par de pepas o una probadita de la yerbita (marihuana), o coca y muchas otras, como muchos suelen dirigirse a estas drogas.
Al hablar de drogas muchas veces lo asociamos como, marihuana, perico, bazucó, cabe aclarara que el alcohol y el cigarrillo son drogas que matan, y muy lentamente; las consecuencias que generan en el organismo. Y que nuestros jóvenes buscan sumergirse poco a poco y casi podría decirse conscientemente, sabiendo del daño que ocasiona en su organismo el consumo y abuso, de las mismas, penetrando en un mundo infernal, como lo es el de la drogadicción; aunque suene bonito pues para muchos jóvenes que en este momento no lo es.
Las drogas nos muestran varias caras. La correcta e hipócrita, por ejemplo, y la cruda y real. Los seres humanos de este mundo respondemos ante las drogas evitándolas en nuestras palabras y disfrutándolas en nuestro organismo. Siempre hay excepciones. Pero habitualmente no hablamos de ellas. Y, sin embargo, el silencio no evita que exista un consumo.
Aunque en los colegios hagan campañas realizadas por DASA, Departamento Administrativos de salud de Aguachica, de prevención frente a temas como la drogadicción, el consumo sigue a aumentado, y ella no interviene en un estrato social o si es de una raza, no a ella solo le interesa es acabar con la salud y llevarlo a la muerta a muchos jóvenes, que ven en ella una salida. Pero una salida a que, tal vez una salida, de esta vida. Lo peor no termina ahí, ligado a este flagelo que ha ido creciendo, es también las tasas de suicidio en el municipio, de jóvenes que sufren d e depresión y las altas tasas de enfermedades venéreas entre la población juvenil, y las prestación de servicios sexuales de niñas entre los 14 y 17 años de edad, conocida como “prepagos”, que en la mayoría de las ocasiones se drogan y otras se embriagan dando oportunidad a que sean victimas de un abuso o violación.
La ciudadanía es consciente de esta realidad; de cómo los jóvenes son las principales victimas de este flagelo y que esta consumiendo totalmente a nuestros jóvenes, lo mas ironico es que la mayoría de estos jóvenes son hijos de padre profesionales, doctores, profesores, psicólogos , es acaso que estos modelos de educación no están funcionando.
El señor Arístides Rodriguez, un señor que consumía alcohol, que me conto su testimonio de vida que hacen parte de la fundación hogares nueva vida, “ yo le doy gracias adiós de haberme sacado de allí, de volver a ser yo otra vez”. Este señor empezó desde muy joven a consumir alcohol hasta llegar a tocar fondo y encontro al profesor Erasmo perona que esta al frente de la Fundacion hogares Nueva Vida, que lo ha sacado adelante con ayuda de personas sentidas con la problematica.
Pues bien se que esta realidad de mi municipio no es solo allí lo mas triste y lamentable es que es una realidad nacional y así el gobierno haga campañas de antiodrogadicion , en carteles y en la televisión, que lo ven mas una obligación que por convicción , sin sentarse analizar la realidad del problema.
Producido por: Diana Consuelo Vargas Mantilla.
Al hablar de drogas muchas veces lo asociamos como, marihuana, perico, bazucó, cabe aclarara que el alcohol y el cigarrillo son drogas que matan, y muy lentamente; las consecuencias que generan en el organismo. Y que nuestros jóvenes buscan sumergirse poco a poco y casi podría decirse conscientemente, sabiendo del daño que ocasiona en su organismo el consumo y abuso, de las mismas, penetrando en un mundo infernal, como lo es el de la drogadicción; aunque suene bonito pues para muchos jóvenes que en este momento no lo es.
Las drogas nos muestran varias caras. La correcta e hipócrita, por ejemplo, y la cruda y real. Los seres humanos de este mundo respondemos ante las drogas evitándolas en nuestras palabras y disfrutándolas en nuestro organismo. Siempre hay excepciones. Pero habitualmente no hablamos de ellas. Y, sin embargo, el silencio no evita que exista un consumo.
Aunque en los colegios hagan campañas realizadas por DASA, Departamento Administrativos de salud de Aguachica, de prevención frente a temas como la drogadicción, el consumo sigue a aumentado, y ella no interviene en un estrato social o si es de una raza, no a ella solo le interesa es acabar con la salud y llevarlo a la muerta a muchos jóvenes, que ven en ella una salida. Pero una salida a que, tal vez una salida, de esta vida. Lo peor no termina ahí, ligado a este flagelo que ha ido creciendo, es también las tasas de suicidio en el municipio, de jóvenes que sufren d e depresión y las altas tasas de enfermedades venéreas entre la población juvenil, y las prestación de servicios sexuales de niñas entre los 14 y 17 años de edad, conocida como “prepagos”, que en la mayoría de las ocasiones se drogan y otras se embriagan dando oportunidad a que sean victimas de un abuso o violación.
La ciudadanía es consciente de esta realidad; de cómo los jóvenes son las principales victimas de este flagelo y que esta consumiendo totalmente a nuestros jóvenes, lo mas ironico es que la mayoría de estos jóvenes son hijos de padre profesionales, doctores, profesores, psicólogos , es acaso que estos modelos de educación no están funcionando.
El señor Arístides Rodriguez, un señor que consumía alcohol, que me conto su testimonio de vida que hacen parte de la fundación hogares nueva vida, “ yo le doy gracias adiós de haberme sacado de allí, de volver a ser yo otra vez”. Este señor empezó desde muy joven a consumir alcohol hasta llegar a tocar fondo y encontro al profesor Erasmo perona que esta al frente de la Fundacion hogares Nueva Vida, que lo ha sacado adelante con ayuda de personas sentidas con la problematica.
Pues bien se que esta realidad de mi municipio no es solo allí lo mas triste y lamentable es que es una realidad nacional y así el gobierno haga campañas de antiodrogadicion , en carteles y en la televisión, que lo ven mas una obligación que por convicción , sin sentarse analizar la realidad del problema.
Producido por: Diana Consuelo Vargas Mantilla.
diana.c.vargas.mantilla @hotmail.com
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